Nos molestamos tanto en pensar en el mañana, la tarea, el trabajo, la sociedad y hasta el amor... que dejamos de ver todo lo que tenemos a nuestro al rededor, todo auqello que no disfrutamos, vivimos, gozamos; y todo eso de repente se va de nuestras manos, no mejor dicho lo dejamos ir; dejamos ir las sensaciones que nos hacen sentir vivos día a día, dejamos de mirar a nuestro al rededor y darnos cuenta de que todo aquello que nos rodea es perfecto dentro de su imperfección, hasta que te miras frente al espejo, pero no frente a un espejo cualquiera, frente al espejo de lo que en verdad es tu vida, entras en retrospectiva y notas; ¡al fin te das cuenta! de todo lo que dejaste ir y nunca valoraste... y sólo queda una pregunta en el aire ¿Habrá otra oportunidad?
Inspirado en un ser que hoy se ah marchado y que pese a todo siempre vivió su vida al máximo, nos enseño mucho y con él se llevó bastante...
No hay comentarios:
Publicar un comentario